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Foto del escritorOsvaldo Maguey

¡Ayuda! Me enamoré y no quiero

Anécdotas del consultorio


¿Te has encontrado en la posición de enamorarte, pero con un miedo paralizante que te hace querer huir? Ilusionarse con alguien puede ser una experiencia maravillosa, pero también aterradora si has pasado por relaciones complicadas.


Nuestras experiencias pasadas pueden transformar la búsqueda del amor en un camino lleno de angustia. 


Es común desear encontrar el amor, pero sentir el impulso de huir cuando la relación comienza a volverse más seria.


Para entender cómo este tipo de disonancia afecta las relaciones, veamos lo que le ocurrió a Gloria*.


Filofobia: Historia de un amor angustiante


Gloria es una mujer profesionista, independiente y apasionada por viajar. Aunque disfruta de las series románticas, confía más en su fiel compañero, su perro Lolo, que en las personas.


Gloria llega a terapia cuando comienza a salir con un tipo nuevo, Carlos, que conoció por una amiga. Ya se habían topado anteriormente en un cumpleaños, pero apenas comenzaron a hablar más y notaron que disfrutaban el uno del otro. 


Gloria lleva un par de años soltera, se ha sentido agusto de esa forma. Le extraña que le atraiga tanto Carlos ya que no se había sentido así por un largo tiempo.


Filofobia: el conflicto entre el deseo y el miedo


Carlos parecía ser el hombre ideal para Gloria, alguien que encarnaba todo lo que siempre había buscado en una pareja. Sin embargo, la idea de que todo esto fuera demasiado bueno para ser verdad la aterraba. Se notaba desconfiada, dudaba de los cumplidos y atenciones que le daba, y en ocasiones regresaba a su personalidad “ermitaña”, de querer estar sola.


Era un gran conflicto, los fines de semana quería ver a Carlos pero cuando se veían, era como si un switch se hubiera activado y se encendía el modo ermitaña que la hacía desear estar sola en casa junto con Lolo.


Por otra parte, si Gloria se quedaba en casa, el switch daba para el otro lado, y extrañaba a Carlos. Se sentía una tonta por haberle inventado excusas para no salir. No importaba que decidiera Gloria, siempre tenía ese conflicto interno.



El miedo a enamorarse


Gloria sufría de un tipo de ansiedad muy común en personas que han sufrido traiciones en el amor, la filofobia: el miedo a enamorarse. Las señales eran muy claras:


  • Sospechaba siempre de las buenas intenciones de Carlos.

  • Sobrepensaba sobre si la estará engañando con sus atenciones y palabras de afecto.

  • Miedo constante a que él haría algo para lastimarla.

  • Reacción defensiva a cumplidos o atenciones de Carlos “¿Porque le compraste premios a Lolo sin consultarme? Se que son los mismo que le doy pero yo puedo hacerlo sola

  • Cambios en decisiones de forma brusca, como cancelar planes a último momento sin explicación o con excusas poco convincentes. 

  • Angustia intensa entre seguir saliendo con Carlos o dejarlo.


La filofobia puede dificultar la creación de relaciones estables y seguras. Una dicotomía entre amo estar contigo y prefiero estar sola. A la larga esto puede provocar una ruptura. Confirmando, falsamente, la idea de “jugó con mis sentimientos




Terapia para el miedo a enamorarse: filofobia 


Como cualquier miedo la única forma de vencerlo es enfrentándote a él. Si sufres de Filofobia puedes seguir los siguientes pasos:


  • Identificar tu Trauma Pasado: ¿Alguna vez has sentido un nudo en el estómago o una sensación de alerta cuando estás con alguien nuevo, a pesar de que no hay motivo real para preocuparte? Es tu cuerpo reaccionando como si estuvieras en peligro, recordándote experiencias dolorosas del pasado.

  • Identificar Pensamientos Irracionales (PI): A veces te dices a ti misma “Esto es demasiado bueno para ser verdad”, “seguro es amable por algo”,”¿por qué me pregunta si ya volví a casa? seguro me quiere controlar” Estas ideas dan por hecho cosas que no puedes saber a ciencia cierta y que no dan pie a otra explicación. Son los que provocan la reacción física del punto anterior.

  • Autodebate: Una vez identificados los PI, es cosa de comenzar a buscar evidencia para confirmarlos o desecharlos. Por ejemplo: Te pregunta si volviste a casa ¿por preocupación o por qué te quiere controlar? Sí es amable contigo parecería que lo hace porque te aprecia. Sí te quisiera controlar ¿no sería más inquisitivo? No solo te preguntaría si llegaste a casa, si no con quién fuiste, tu ubicación o pediría pruebas ¿Lo hace?

  • Practicar Técnicas de Relajación: Controlar solo los pensamientos puede ser insuficiente cuando tu cuerpo sigue sintiendo un peligro donde no lo hay. Puedes practicar la respiración profunda o la tensión/distensión de músculos, estos ejercicios ayudan a mitigar dicha reacción fisiológica para que mente y cuerpo dejen de percibir una amenaza inexistente.



Busca Apoyo Profesional


Una filofobia no tratada puede provocar un autosabotaje en todas tus relaciones. Lo que puede llevarte a sufrir depresión y ansiedad profunda. 


Recuerda que no estás sola, obtén ayuda hoy mismo, y comienza tu camino hacia una forma de relacionarte sanamente y de forma segura. Contáctanos hoy mismo y comienza tu proceso de sanación con el apoyo de nuestros especialistas.


*Todos los nombres utilizados fueron modificados para resguardar la identidad real de las personas.

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